Capacidad de superación

Me encuentro con está entrevista, a una joven gallega que se vio obligada a dejar su colegio a los 14 años acosada por su compañeros. Que a los 19 años hace ESO en nocturno mientras trabaja. Que se matricula en la UNED en Ciencias Políticas en el 2003 y en el 2005 se licencia, y le dan un premio por su expediente académico. Que aspira a aprobar unas oposiciones al Cuerpo Diplomático, donde solo hay tres mujeres. Por su capacidad para superar las dificultades las aprobará.

Es agradable, ver que la capacidad de superación que tienen algunas personas, el ver que el esfuerzo y la constancia aún son necesarios para llegar a las metas fijadas.

Hay que evitar que nuestros jóvenes muestren sus preferencia por ser futbolistas o famosos y solo por tener asociados riqueza y vivir bien sin pegar golpe ni mirar al prójimo. Parece más sensato las aspiraciones de nuestras jóvenes, que quieren ser enfermeras o médicos, que requieren más esfuerzo personal y más entrega al vecino.

Que los miles de jóvenes que estos días preparan sus exámenes de septiembre, piensen que solo con su esfuerzo pueden llegar a metas muy altas.

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2 comentarios en “Capacidad de superación

  1. Tienes toda la razón del mundo,Eifonso, en que en la sociedad actual de destaca a una serie de personajes o estereotipos «ganadores» que parecen conseguir todo a base de tocar las pelotas (lo digo por los ejemplos que tú mismo has puesto) al prójimo.

    El esfuerzo ha dejado de ser garantía de futuro (y eso en parte se lo debemos a la precariedad laboral consentida por muchos de nuestros gobiernos anteriores y fomentada por un sector empresarial adicto al juego fácil de bajar sueldos y temporalizar empleo para aumentar los beneficios).

    Factores hay muchos y muy diversos para perder la motivación… y siendo jóven eso es aún más fácil. Por eso casos como éste nos llaman la atención… por su valor añadido.

    Casi siempre apreciamos más las cosas cuando no las tenemos. Esta chica apreció más la educación cuando tuvo que apartarse de ella y dedicarse a trabajar cosiendo.

    A lo mejor, de no haber mediado el acoso escolar, hubiera sido una más del montón.

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