Una vez más en EE:UU. se dan muestras de la doble moral que allí están tan acostumbrados a practicar. Ni se dan cuenta hasta donde puede llegar la inutilidad de algunas decisiones que toman.
Mientras en muchos estados se sigue aplicando la pena de muerte, a la vez se prohibe el aborto, los matrimonios del mismo sexo o incluso practicar sexo oral.
Y dentro de esa doble moral se puede encuadrar el caso de la censura a un anuncio de la fragancia “Secret Obsession“ de Calvin Klein, protagonizado por Eva Mendes. La mayoría de las televisiones norteamericanas consideran demasiado sexy el anuncio y han optado por no emitirlo, motivo, se ve parte de un pezón.
Siguen sin enterarse de que existe Internet, en este momento el anuncio corre por la red a velocidad de vértigo. Os dejo el vídeo y estos dos enlaces – YouTube y Metacafe– en donde su puede ver repetido multitud de veces, dado que se intenta censurarlo también en la red. Algunos se empeñan en ponerle puertas al campo.
Este país (USA) necesita un nuevo presidente, es un total desastre. Esto es una mala broma, francamente bastante molesta, cuán hipócrita se ha vuelto este país. ¿Está bien para los niños que vean gente matándose con armas? Ahora sería buena idea mostrar un poco de amor. Eva, está siendo un poco sexy, pero las imágenes no son provocativas.
Fabien Baron, Director creativo de la agencia publicitaria.
El problema es que son muy conservadores, y el conservadurismo suele llevar a la doble moral. En estos sistemas éticos se pone el dogma moral por encima de la práctica de esa moral.
Es decir, se consiente que una persona haga inmoralidades (por ejemplo, cometer adulterio) , siempre y cuando no lo haga público y no ataque públicamente el dogma (que no diga que el adulterio no es inmoral). Por eso, los mismos que claman contra este o aquel «ataque a la familia», en secreto le pueden poner los cuernos a su esposa, y mientras no se haga público, no les genera mayores remordimientos de conciencia.
En primer lugar déjame saludarte después de estos días de desconexión.
Sobre la doble moral de los norteamericanos, no puedo hacer más que darte la razón y expresar mi asombro, porque toda la energía que dedican a reprimir imágenes como las del «spot», no les ha impedido colocarse a la cabeza de la producción de cine pornográfico y encabezar la triste clasificación de delitos sexuales contra mujeres en el mundo occidental.