En Noruega hay carreteras y acantilados situados la borde del mar y de los acantilados, el riesgo de posibles desprendimientos de rocas y tierra es alto, para asegurar los acantilados han empezado a usar helicópteros, provistos de una bola de demolición golpean la parte del acantilado provocando el desprendimiento, a continuación asegurar y limpian el terreno arrojando grandes cantidades de agua.
Vía | Fogonazos